EL ANALISTA DE INTELIGENCIA Y SU FORMACIÓN EN TÉCNICAS DE ANÁLISIS
Desde hace tiempo se está tratando de convertir en una disciplina científica el proceso mediante el cual un analista transforma la información que recibe en inteligencia, y base a la cual elabora un producto para apoyar un proceso de toma de decisiones o de planeamiento de la organización a la que pertenece.
Como es bien sabido, inteligencia es de aplicación en campos tan diversos como el empresarial, militar, policial, económico, social y político, cuya finalidad es proporcionar elementos de juicio al decisor, y reducir la incertidumbre.
FACTORES QUE INFLUYEN EN EL ANÁLISIS DE INTELIGENCIA
El proceso de transformación de la información a un producto de inteligencia es influido por múltiples aspectos. Entre los que podemos destacar:
- Los procesos de razonamiento del analista.
- La influencia de sesgos y prejuicios personales o de la organización a la que se pertenece.
- Los procesos de evaluación y análisis de la información
- La información que tienen a su disposición los analistas, ya sea porque es excesiva o escasa.
- El conocimiento que tengan los analistas sobre el asunto que se esté analizando.
- La experiencia de los analistas.
- La falta de formación de los analistas.
LAS TÉCNICAS DE ANÁLISIS EN LA ELABORACIÓN DE INTELIGENCIA
Durante los últimos años se ha potenciado el empleo de una gran variedad de técnicas, con el fin de mejorar el análisis de inteligencia. Desarrolladas por académicos y profesionales de inteligencia, estas técnicas facilitan que el analista, o equipo de analistas, puedan utilizarlas para revisar sus propios pensamientos y supuestos.
Es decir, nos referimos a mecanismos por medio de los cuales los procesos internos de pensamiento son externalizados de forma sistemática y trasparente a fin de poder ser compartidos, entendidos y criticados por otros.
La aplicación de estas técnicas estructuradas tiene varias ventajas:
- Disminuyen las probabilidades de que el analista se vea influenciado por sus sesgos y prejuicios.
- Ayudan en el proceso de argumentación para llegar a las conclusiones que se presentan.
- Facilitan la evaluación de la información disponible.
- Dejan una trazabilidad, es decir, permiten que, en un momento dado, el receptor de la información pueda ser informado del proceso que se ha seguido para llegar a las conclusiones.
- Permiten la puesta en común de la evolución del proyecto analítico entre todos los implicados.
- Facilitan la revisión de los productos analíticos en el futuro o cuando algo ha fallado.
LA FORMACIÓN DEL ANALISTA ES CLAVE
Sin entrar a considerar los conocimientos específicos que tiene que tener un analista de su campo de especialización, su formación y entrenamiento en la aplicación de las distintas técnicas de análisis redundaría en benéfico de los productos de inteligencia que elabore.
Esta formación no es una tarea fácil ya que, aunque es posible aprenderlas de manera limitada, es necesaria la guía de un buen instructor para que el analista en formación comprenda perfectamente las ventajas e inconvenientes de cada una de las técnicas y su interrelación con otras.
Respecto a cuáles son las Técnicas de Análisis que, de manera imprescindible, debe de conocer un analista de inteligencia, me remito a la paradoja del clavo y el martillo: “si la única herramienta que conoces es el martillo, tratarás todos los problemas como si fueran clavos”. Es decir, cuanto mayor número de técnicas domine, mejor.